viernes, 29 de abril de 2011

Visitantes de Wonderland

No sé muy bien quién camina por Wonderland.

Conozco de vista algunos de los habitantes, las caras de otros me suenan, pero también hay mucha gente que son desconocidos para mí, pero no sé, aún siendo así cuando me los cruzo en la panadería, o comprando el periódico, o tomando una cerveza en el bar de Alicia, presiento que hay una conexión entre eses desconocidos y yo. Lo sé,  suena extraño, pero .... ¿no es maravilloso?.

Muchas veces cuando salgo a echar la basura con mis zapatillas de estar por casa, los pelos revueltos y los veo alrededor, me gustaría saber qué piensan de mí, ¿me prestarán atención?. O cuando dejo la mirada perdida, deambulo sin saber a donde ir, yendo, huyendo, viniendo, buscando....¿entenderán en mi caminar lo que siento?. Y en el momento que río, ando y río a la vez, por lo que me ha venido a mi cabeza o por lo que quería que me viniera y ha sido lo contrario, ¿se reirían conmigo si lo supieran?.

Una vez, yo venía de echar un par de cervezas y estaba cerca de mi apartamento en Wonderland, cuando me encontré con uno de los de las caras que me suenan. Me paró, no sabía de que lo conocía (sigo sin tenerlo claro) pero me dijo que me había visto un par de veces comprando pan, también en el bar de Alicia una vez donde estaba con una amiga tomando un té rojo y otra ocasión tirando la basura. Dijo esto y se marchó. ¿Será que sigue mis movimientos?. Fue pensar esto, esbozar una sonrisa y sentir que hay gente para la que existes que tú no lo sabes. Repito....¿no es maravilloso?

jueves, 28 de abril de 2011

"Be"

"Be" suele venir a visitar Wonderland. Entra, se pasea, conoce muchos de los rincones, a veces descubre alguno nuevo...Hace mucho tiempo que no me tomo una cerveza o un GinTonic vs Gin Lemon con "Be", pero se de "Be" todos los días, nos sentimos en la distancia conociendo nuestros segundos, "Be" es imprescindible en mi día. Es curioso, incluso huelo (sí, ya sabes...hueles) su perfume después de que haya pasado por mi casa en Wonderland.

"Be" esta canción va por tí...ya sabes, amo a  Amelie Poulin.

miércoles, 27 de abril de 2011

La disección

Pedro y yo nos conocemos prácticamente de toda la vida; segundos, minutos, horas, lustros y décadas...hemos pasado juntos (y pasaremos). Pero no me acuerdo de nuestros primeros días.

Hace un par de días, andaba rumiando en mi cabeza sobre la gente nueva que está pasando por mi vida, quise pararme y hacerme una idea en ese ahora, en ese momento, en los inicios, de cómo los veía a ellos. 

Cuando estoy con ellos, quiero sentir el frescor de los primeros gestos, interpretar lo que no dicen con ellos, lo que sus ojos esconden cuando te miran. Disfruto viendo como el toque de pelo nervioso y consecutivo ocurre con determinadas conversaciones, cuando la pierna se agita a mayor ritmo y el cuerpo se mece. Observo el movimiento de las manos: rítmicos, comedidos, espontáneos... Diseccio esa palabra no dicha, sustituida en el último momento. Acaricio el cruce de miradas; algunas cómplices, otras expectantes y las mejores, deseosas de escuchar, sentir y conocer. Curioseo la expresión al saborear un café, una infusión con mucha azúcar, un dulce, una galleta o un cigarro a medio acabar. Comparo la postura al hablar, al escuchar, al sentir profundamente de ellos y la mía. Me deleito de estar con ellos, de estar conociéndoles, de catar mías, sus, nuestras herramientas y defensas ante ellos, yo, nosotros mismos.

Es curioso, pero creo que es normal, Pedro que es todo para mí y aún hay novedad entre nosotros, pero una novedad menos frecuente y menos fresca. Ellos quiero que sean  mucho para mí, y su novedad eclosiona en mí, golpea, rompe desmesuradamente. Es el primer momento, la inocencia en su estado puro. Pero... ¿me olvidaré de estos recuerdos, de estos momentos, de estos instantes del conocimiento del todo y de la ignorancia de mucho?. ¿Me pasará como me ocurre con Pedro?, difícil de recordar cuando vi su primera mirada furtiva al hablar puramente de él.

Bueno, en este caso, siempre podré releer este absurdo y mal  escrito texto.

lunes, 25 de abril de 2011

No he ido a la calle melancolía

Hoy me han rescatado de una tarde en la calle melancolía....y me han regalado una tarde especial de Domingo.

Una tarde que sí, se quedará siempre conmigo y la guardaré en mi memoria, en el rincón destinado a los momentos sorprendentes y singulares. Esa calle la tengo localizada, la visito a menudo.


domingo, 24 de abril de 2011

Dentro de la media

Yo, Pedro, ayer me dijeron que era un tipo "dentro de la media". Lo de "dentro de la media", siempre me ha divertido, ¿qué significa?.

Yo, Pedro, queriendo buscar siempre todo "fuera de la media". No se lo que significa tampoco, pero será el sitio para buscar, no encuentro nada "dentro de la media".

lunes, 18 de abril de 2011

Los "hoys" (plurar de hoy)

- Hoy no me aguanto.
- ¿Eso es nuevo?
- Sí, claro. El hoy es algo nuevo, ¿no?.
- Sí, claro. Yo tampoco te aguanto.

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- Hoy estás diferente.
- ¿Qué me notas?.
- No sé. En general, estas diferente.
- ¿Y si ayer era diferente y hoy soy normal?


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- Hoy soñaré contigo.
- Perdona, pero hoy estoy muy cansada, estaré durmiendo en tu sueño.

domingo, 17 de abril de 2011

Cuando no se sabe decir algo

Escribes y borras. Vuelves a atrás y relees lo escrito, no te gusta, modificas. Dejas de oír el teclado, estás pensando. Hoy no encuentras nada que decir, o no quieres decir nada. Suena el teclado, cuatro palabras y paras, relees, borras todo. Empiezas de nuevo. Miras por la ventana. Juntas letras de nuevo lentamente, aparecen en la pantalla rítmicamente con el golpeo de tus dedos en las teclas.

Te detienes, abandonas la tarea y dejas estas palabras sin sentido en el blog de Pippipat.

sábado, 16 de abril de 2011

El cuarto año

Como ando en mis pensamientos nostálgicos y variados en el "ser y estar". Rescato un texto que realicé durante la visita de Félix Romeo al Taller de Escritura que frecuento. 

Félix Romeo nos propuso un ejercicio en el que debíamos escribir una especie de biografía, con la obligación de que la frase no tuviera  más de cinco palabras. He aquí lo que dio mi cabeza, sin retoques post-taller:

"EL CUARTO AÑO

Noche de invierno y un fallo. Nueve meses después....Pippi. Un momento casual de mi existencia. Una vida rodeada del azar. Ciudades y países varios, flujo de gente. Desde Zaragoza a Murcia, tres países. El primero Bélgica, la juventud: el primer amor. El segundo Holanda, la loca adolescencia: porros, sexo y alcohol. El tercero Dinamarca: la felicidad y los amantes. Errante de uno a Zaragoza, de Zaragoza al otro. Amigos, amores, desamores dejados y cogidos. Destino momentáneo, ¿o no?, Murcia. 

Tres años de vida Murciana. Tres años de marineras y tascas. Tres años de Estrella de Levante. Tres años del mismo trabajo. Tres años de poco sexo. Tres años buscando mi sitio. Tres años de amores duros. Tres años de búsqueda de mí. Tres años de búsqueda de otros. Tres años de mi vida.

Siempre me pregunto por el cuarto. ¿Habrá cuatro años de marineras?. ¿A qué sabrá el cuarto año?.

No lo sé. Seguiré rodeada del azar"

jueves, 14 de abril de 2011

Son sus amigos

Pedro siempre me dice que ama la amistad.

Me encanta observar cómo se acerca a sus amigos, cómo habla de ellos, deslizando palabras que los acarician. Disfruto viendo la manera que sabe acercarse a ellos, sin tocarles pero haciéndose presente. A veces incluso, recrea lo que haría con ellos en el momento instantáneo que aparecen en su memoria y lo que les diría, le hace sentir que están más cercanos, que están a su lado.

Pedro siempre me dice que ama la amistad, nunca me ha dicho que ama a sus amigos, pero...es lo mismo, ¿no?.


miércoles, 13 de abril de 2011

Entre mis recuerdos

Una de las letras más bonitas....y que me pone en un estado de ánimo nostálgico, feliz, vital....(madre mía, ¡todo eso junto!)

"Para encontrar la niña que fui
y algo de todo lo que perdí,
miro hacia atrás y busco entre mis recuerdos"


Voy a morir

Hoy he asistido al taller de escritura.

Andaba meditabunda, estaba en mis pensamientos, iba y venía, un poco a-pát-ica también, recorría cada hueco de mi cabeza, observaba, me distraía con mi compañero, seguía yendo y viniendo y escuchando a mi cabeza. Entre todo este ajetreo que me llevaba, teníamos que escribir un texto, basado en un objeto tocado e identificado en una caja y crear un relato de miedo.

Mi inspiración no estaba conmigo, el miedo no me gusta (lo he cambiado por angustia, que se me hace más fácil recrear) y mis pensamientos no me dejaban pensar con fluidez. Pero aún así, voy a colgar el pobre texto, sin retoques post-talleres (hoy he dicho que no estaba inspirada y mis pensamientos andan hiperactivos, pero quiero intentar mover el blog para mí misma):

"Voy a Morir. Ahora mismo me queda uno, dos, tres, cuatro...segundos menos de vida. Mi vida no es vida, si no es mi muerte, ¿por qué llaman vida al camino hacia la muerte?.

Un minuto más cerca de la muerte.

Mis órganos van envejeciendo, la sangre se convierte cada vez más torpe en su deambular por mi cuerpo.

Acaba de pasar un minuto y medio, lo acabo de perder.

Mi piel se marchita, ya no será tersa nunca más. Mis padres se mueren.

Dos minutos de paseo ya hechos.

Mis hermanos enferman, Juan ya se fue. Yo lloré.

Dos minutos y medio menos de espera.

Ayer fue ayer, nunca volverá, se fue. ¿Qué hice?. Nada. Me voy a morir. Mi mente me asusta, no recuerdo fechas, sé que algún día no recordaré nombres.

Tres minutos pasados.

Mi hija será huérfana, puede que no conozca a mis nietos. Las hojas de los árboles también se caen, pero ellas vuelven a salir. Yo no.

Tres minutos y medio recorridos.

Veo mis cenizas en el cofre, ¡qué poco abultan!. Me quedaré en nada, escasos 300 gramos de polvo.


Voy a morir. Se que vosotros también vais a morir. Nos quedan cuatro minutos menos."



(Tengo que pensar porqué se me ha ocurrido esto....creo que en el fondo lo sé)

"Nies"

La vida es curiosa.

Giremos la cabeza ocho años atrás y a unos momentos compartidos con una persona, nada más.

No sabía como se llamaba su marido, ni cuántos hermanos tenía, ni siquiera su edad, ni en que trabajaba realmente, ni si era de izquierdas, ni si le gustaba el arroz con leche, ni si ponía vinagre a la ensalada, ni si algún día la volvería a ver. Sólo sabía que le gustaba el café sólo y a las 11am, cuando me lo tomaba con ella.

El tiempo pasó, el silencio entre nosotras, no había mucho que decir, los momentos no fueron cómplices suficientes, había muchos "nies" que desconocía, bueno,  que desconocíamos (desde que no me peino soy reservada para mi vida). Pero la vida es un continuo movimiento (tú que me lees, llegado por azar, por desgracia o por intención, te has movido sintóticamente o asintóticamente conmigo,  por eso estás ahora delante de este texto absurdo) y a veces es por eso que nos cruzamos (cruzar según la RAE: Pasar por un punto o camino en dirección opuesta). Y así fue, estando en caminos opuestos, coincidimos en un punto virtual y lo prolongamos en el tiempo. Y los "nies" ya eran menos "nies" y los momentos eran más cómplices.

Hace dos días, tome un café con ella (sin azúcar, le sigue gustando así), conocí a su marido Paul, a sus hijos David y Kim, el paso de los años nos había sacado alguna arruga y unas canas (ella un poco más, la diferencia de 7 años entre nosotras). Me resultó curioso que tuviera alergia a la leche y a los ácidos, que hubiera cambiado tanto de trabajo hasta llegar a uno que le estaba apasionando, que sus tres hermanos estuvieran en diferentes países viviendo y que nunca hubiera votado, y sobretodo el volver a verla.

Sí, la vida es curiosa.

martes, 12 de abril de 2011

Evolución

Se levantó y se fue. Todos pensaron que volvería. Pedro siempre bromeaba con irse, no volver, cambiar, moverse, partir, reinventarse. Todos pensaron que volvería.

Al día siguiente nadie vio a Pedro. Pero todos pensaron que volvería.

El tiempo pasó, Pedro no volvió.

Ya nadie pensó que volvería.

lunes, 11 de abril de 2011

Para cuando se nos olvida....


Quiero vivir, quiero gritar,
quiero sentir el universo sobre mí
Quiero correr en libertad,
quiero encontrar mi sitio!!!


jueves, 7 de abril de 2011

Hoy voy a hablar de tí otra vez...y del Aleph

- ¿Cual es la curiosidad de hablar de mí?
- Me gusta, me divierte, me encanta meterme en tu cerebro que crees que es hermético, que nadie conoce y es más obvio de lo que crees.
- No sabes lo que siento.
- Sí claro. ¿No sé que ayer cuando me miraste, me dijiste con tus ojos, con tu movimiento nervioso sobre tu pelo, con tu habla rápido y lioso (que sé que esto último te encanta hacerlo así) que no era tu día?
- Ayer fui feliz, eso creo, no te entiendo, fue un día, un buen día.
- Ayer quizá  fuiste feliz, incluso más que otras veces, por eso pasó algo más ayer y hoy  quizá incluso, ¿me equivoco?. Has vuelto a ver dentro del Aleph (ves, te conozco, sé que amas a Borges y además sabes a que me refiero).
- El Aleph es infinito, todo lo abarca, no tiene limites. No me entiendes del todo, si no estarías ahora conmigo, sabes que te necesito. Pero bueno sí, creo que quizá algo me entiendas, incluso has visto que quiero volver a cruzar límites, o quizá ¿no?, sólo imaginarlos. Pero eso es el Aleph.
- ¿El Aleph? Es poético, incluso bucólico. Pero.... ¿por qué no te explicas mejor?.
- Porque creo que no me quiero escuchar....

http://www.textosenlinea.com.ar/borges/El%20aleph.pdf

martes, 5 de abril de 2011

Una vez...

...un momento, un segundo, unas horas, un instante, un siglo, un minuto, un respiro... y todo eso pasa en un día.

domingo, 3 de abril de 2011

Hoy voy a hablar de tí....

El tiempo pasa, la gente viene, a veces se queda y a veces se va, la vida transcurre, no nos paramos, siempre seguimos, no nos damos tiempo, no nos dejan, no nos dejamos. Pero llega un día, que te tomas tu tiempo, que te dedicas a tus sentimientos, a tus recuerdos, a recuperar a gente que ya no está cerca físicamente, pero que estuvo tan cerca que no entiendes cómo puedes vivir sin ellos al lado.

Y ese día te lo encuentras caminando por unas calles que te hicieron sentir. Y llegas a esa plaza donde la lluvia mojaba tu cara, tu cuerpo borracho, tus manos abrazadas a ellos, girando y cantando, creyendo que en ese momento se había creado una amistad indisoluble, sintiendo que eras la persona más feliz y que tenías un mundo esperándote. Bendita inocencia de la juventud, no perdida (como has escrito hace poco) del todo, pero si modificada. Creo que eso te sangra....

Los sentimientos se agolpan, no dan tregua. La siguiente parada es en el bar donde vestías de rojo en la foto que guardas. Miras alrededor, no sabes porqué, quizá ¿haya alguien conocido?. Reconoces el sitio donde se hizo la foto, recuerdas esa noche, las risas, las conversaciones de la vida, de tu vida, de sus vidas. Otro golpe para tu alma.

Tus pasos son torpes, indeterminados, has perdido la fluidez al caminar, cada movimiento acarrea un sentimiento, una persona, un momento. Es curioso como se puede recordar detalles singulares con una precisión que se acerca a lo insano. Y ya estás ahí, delante de esa obra que te asombra, que admiras, que durante tres meses de tu vida veías todos los días. Delante de la cual te hiciste una foto con él, que no te quiso pero te besó para que te llevarás un recuerdo hiriente de algo que nunca sería. Esa obra a la que volviste con la cabrona, con tu amiga, un par años después. Sentadas en el césped (ese césped huele diferente) riendo, cerrando un viaje de fin de semana de complicidad, de los que solíamos hacer, sin rumbo, sin tiempo, sin límites....



Allí está, diez años después, la calle que recorrías todos los días, la calle que de la mano de otro él hiciste a la estación limpiando sus lágrimas y desgarrada tú por dentro. Otro él no se lo merecía, tú no merecías a otro él. La calle de la que te fuiste. El taxi negro, acompañando al día, vino y te llevo al aeropuerto, pero tú entera no ibas en ese viaje, una parte de tí se quedó ahí, la viste cuando has vuelto, cuando has descubierto que tu ser deambula errante por muchos sitios y que lo te los encuentras cuando vuelves.

¿Por qué no recoges un poco de ellos?
¿Por qué no vuelves a la inocencia?.

viernes, 1 de abril de 2011

Corría el año 2003

Les Rita Mitsouki me hace mirar atrás, a muchos años, a noches de porros y cerveza, confesiones al desnudo y alguna incluso desnuda, a una inocencia de la juventud (quizá un poco perdida, pero no aún destruida), a sueños y promesas..... corría el año 2003